Con gran pesar abrimos este nuevo número de Ábaco despidiéndonos de uno de los más importantes historiadores de la ciencia en el panorama actual español: Mariano Hormigón Blánquez. Después de enviarnos su colaboración extraordinaria para este número de Ábaco sobre la ciencia española y el exilio, en el que Mariano Hormigón abre el camino para la revisión de la ciencia española en el franquismo, tuvimos que lamentar su inesperada muerte, acaecida el pasado 21 de julio. Como no podía ser de otra manera, la revista Ábaco dedica este número especial a su memoria. Mariano Hormigón vino a Gijón después de muchos años de ausencia en el año 2000 invitado por la Fundación Gustavo Bueno para participar en los quintos Encuentros de filosofía de Gijón, celebrados en julio de aquel año 2000. Aquellos encuentros dedicados al análisis de las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad industrial nos permitieron disfrutar no solamente con su extraordinario trabajo en el campo de la historia de la ciencia, sino también en el campo de las relaciones entre la ideología y la ciencia, que fue por donde se desarrolló mayormente aquel evento.
Posteriormente, colaboró con la revista Ábaco en un número especial dedicado al 250 aniversario del Primer discurso de Rousseau que respondía a la cuestión planteada por la academia Dijon, «si las ciencias y las artes han contribuido a la depuración de las costumbres». Mariano Hormigón arremetió sin miedo contra Rousseau en un memorable trabajo que queda registrado en la historia de Ábaco.
En la segunda parte de nuestro número se revisan algunas figuras conocidas, como Ochoa, por Emilio García García, o Cabrera, por José Manuel Sánchez Ron; y otras, casi anónimas pero importantes para comprender el alcance del exilio científico español, como el caso del profesor gallego Pedro Cruceiro Corral queAlción Cheroni ha recuperado para nosotros. El número quiere ser también un recuerdo y homenaje a personajes de gran relevancia en la organización institucional del exilio científico. Así Fernanda Peset nos ofrece una semblanza de Francisco Giral, quien recogió la memoria de su trabajo en México en su importante libro, Ciencia española en el exilio (1939-1989). El exilio de los científicos españoles, publicado en Anthropos en 1994. José Cobos Bueno, desde la Universidad de Extremadura, nos trae a la memoria la figura de Francisco Vera, cuya contribución —no exenta de polémicas— al desarrollo de la historia de la ciencia en España ha sido absolutamente esencial.
Aunque este número se concibió como repaso histórico sobre aspectos institucionales y sociológicos de la ciencia española de la primera mitad del siglo XX, como elemento del debate sobre la recuperación de la memoria histórica, y en lo posible también como matiz para disolver posturas anquilosadas; no podemos dejar de concebirlo, por desagraciadas circunstancias, como un improvisado pero sincero homenaje a la memoria de Mariano Hormigón, entregado apasionadamente al estudio de la historia de la ciencia y a la lucha por la justicia social.
Sumario
Presentación
Pablo Huerga Melcón
Instituciones
- Ciencia y franquismo
Mariano Hormigón Blánquez - Exilio científico español
José María Laso - Unión de Profesores Universitarios Españoles – UPUEE
José Cobos, Cristina Carapeto Sierra, Antonio Pulgarín Guerrero - Edad de plata de la ciencia española
Elena Ausejo Martínez - Catedráticos de Química de la I República
Inés Pellón González - Expediciones por España
Nikolái Ivánovich Vavílov - La enseñanza de Historia de las Ciencias en España
Francisco Vera Fernández
Situaciones
- Pedro Couceiro Corral
Alción Cheroni - Blas Cabrera
José Manuel Sánchez Ron - Severo Ochoa
Emilio Ángel García García - Los Giral
María Fernanda Mancebo Peset - Francisco Vera Fernández de Córdoba
José Cobos Bueno
Notas, críticas, recensiones, libros
- 2005: el año de Einstein
José Altshuler - Festejen, uruguayos, festejen – Abaco en Uruguay
Armando Olveira Ramos - Uriel Bonilla
- Miguel A. Álvarez
- David Porcel
- Alejandro Plaza
- Pedro M. Pruna
- Roberto Ruiz García