Se estudian los orígenes y desarrollo de la Sociedad Ibérica del Nitrógeno, denominada en su última etapa como Nitrastur; la nueva planta ubicada en Barros (Langreo) con el papel esencial de Carlos Fernández Casado, notable exponente de la arquitectura de los ingenieros; igualmente se aporta un documentado análisis sobre el contexto social, económico y productivo de la industria de los fertilizantes en España con su correlato aplicado a la situación de Asturias; así como una aproximación a la normativa legal y administrativa respecto al Patrimonio Industrial y Cultural, necesaria y procedente para enmarcar los testigos o testimonios heredados de sus avatares productivos o comerciales.
Se ofrece una rigurosa y pormenorizada descripción histórica y antecedentes de los elementos edilicios o fabriles del conjunto estudiado, es, sin duda, un exponente singular de la herencia cultural proveniente del patrimonio de la industrialización asturiana, por ello merecedor de salvaguardar en cualquier plan urbano o de refuncionalización que se faculte.
Prólogo de Miguel Ángel Álvarez Areces.